martes, 15 de noviembre de 2011

Textuales

La Araña Leñini- ¿Jugamos en el Chindamo?
Anónimo- Sí.
La Araña Leñini- Ese estadio lo llevo en mi sangre...

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Crónica de una partida

Fiel a su estilo, Chindamo News intentó nutrirse de rumores y comentarios al azar para dar forma a una crónica imparcial y objetiva, pero se encontró con un cerrado hermetismo por parte de players y testigos ocasionales. Nadie quiso hablar. Hasta que llegó una crónica a esta redacción. "Viene de arriba, hay que publicarla tal como está", fue la única explicación. Sin embargo, dicha crónica omitía un episodio que bien vale reflejar en estas páginas. Buffy llegó al Polideportivo Bondino vistiendo de manera casual, con una casaca albiceleste bajo el sobaco. Saludó a Tomás de forma amena pero la respuesta fue poco cortés.Se topó con reproches por su impuntualidad y quejas por un supuesto trabajo mal realizado. El gesto de Buffy fue por demás de elocuente, tanto que tras un intercambio de sentencias desconcertantes Bondino aclaró: "Yo no soy Tomás". La aseveración, que en cualquier otro contexto hubiese sido innecesaria, se tornaba imperiosa para subsanar el malentendido. No era Tomás Bondino, efectivamente, sino su clon perfecto de mismo apellido, y Buffy no era un empleado del polideportivo sino un veterano futbolista del Chindamo.
Sin más, la crónica.

►Un match pedorro

Al mal tiempo, buena cara... y más Chindamo. Pese al inclemente clima la jornada futbolística correspondiente a la Semana de las Colectividades se llevó a cabo sin mayores contratiempos.

Tras la violenta tormenta de la noche previa, y pese a los ruegos e imploraciones a San La Lluvia para que no desatara el terrible meteoro que todos vaticinaban devastador, el Chindamo alternativo, con techo y césped sintético, abrió sus puertas para los presurosos (y sudorosos) players chindamistas, que en buen número se llegaron hasta la sede B a despuntar el noble vicio de la redonda.

Igual que el Bichi Borghi en la selección chilena, dos jugadores fueron desafectados por el estado deplorable en el que se presentaron a practicar el deporte más bello del mundo. Ni Chachi Verona ni Araña Lenine fueron de la partida esta vez, pero sus lugares fueron ocupados con hidalguía y entusiasmo.

El trámite del match fue bastante pedorro, justo es decirlo, y nadie sobresalió demasiado, necesario es recalcarlo. Del resultado casi nadie se acuerda, hubo goles pero no de gran factura.

Lo único rescatable fue la actuación de Sócrates, no el elegante delantero brasileño de la década del 80 sino el perrito de los Bondino Brothers, y los gritos desesperados de Tomasito para que el cuzquito saliera de una vez por todas del field.

viernes, 4 de noviembre de 2011

Nuevo estadio Doménico Chindamo

A la espera de la aprobación de los pliegos licitatorios, esta es la maqueta 3D del nuevo Estadio y Complejo Deportivo Doménico Chindamo.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Más profesionalismo, menos espíritu deportivo


Si en algo coinciden vencedores y vencidos de la jornada del miércoles 2 es en que el Doménico Chindamo ha ganado en profesionalismo. De pronto, se juega con más entrega, con más rispidez, vehemencia, rigurosidad. Pero quedó en el camino aquel espíritu deportivo que siempre engrandeció al Chindamo: hay menos solidaridad, menos contemplación, diversión, cordialidad.

Quedó demostrado apenas en una situación de juego. Cecé y Bondino se encontraron disputando la pelota y terminaron cruzando acusaciones, viejos rencores sin resolver, que incluso llegaron a alguna pecheada y un empujón que pudo desencadenar un inútil derramamiento de sangre. Muchachos: paremos la pelota, volvamos a la alegría de disputar una sana justa deportiva y dejemos de lado la desalmada lucha por vencer a cualquier precio.
El Negrolito prepara el centro, El Túnel Fernández intenta evadir a su
 propio hijo, y Buffy le pide a Bondino una cita a la luz de las velas.
Fiel a su estilo imparcial y pragmático, este medio se nutrió de todas las voces de los que fueron testigos del cotejo. Así, el propio autoproclamado goleador se reconoció muy por debajo de su nivel, apenas a un 40% de su potencial, lo que representaría un seis u siete por ciento en un deportista de elite. La magra efectividad de Cecé, convertido en protagonista por razones que exceden lo deportivo, agigant{o la figura de un Buffy despampanante, abundante en lírica y en el capital de todo goleador: las conversiones. El propio player aseveró una sumatoria de seis dianas, aunque otros testimonios dan cuenta apenas de cuatro tantos a favor de su propio team y el resto en contra de la valla defendida por su portero.

Andrés (der.), el futuro crack, intenta
no mirar a Bondino mientras se toca.
La foto tiene mucho césped acá abajo
porque el verde viste, ¿viste?
No obstante, el M.V.P. de la cancha llegó desde la cantera del Chindamo. El pequeño Andrés, convidado a participar apenas como reportero gráfico freelance y finalmente aceptado para demostrar su valía sobre el verde césped, demostró ser el futuro de la institución. Gambeta, repentización, visión de la cancha, cambio de ritmo, llegada, efectividad y prestancia lo señalan como un próximo crack pronto a estallar. Primero fue celebrado con vítores de propios y ajenos, pero en pocos minutos la admiración de los rivales trocó en desesperación y quienes minutos antes le permitían dar rienda suelta a su creatividad luego lo sometieron a una marca rigurosa e incluso le propinaron algún puntapié aleccionador que enrojeció sus tobillos.

El Negrolito celebró la irrupción de este joven integrante de una familia de verdadera estirpe futbolística, al rememorar "cuánto hace que no decíamos: «Bien ahí, Fernández»". También la progenitora de esta promesa del esférico se manifestó emocionada de que el pequeño Andrés haya recuperado el apetito y se clavara dos platos de merluza con puré, lo cual también le deja menos comida para el padre, que mal no le viene.

►Nota: la pobre producción fotográfica fue adquirida a Cecé a un precio de $3,25 la unidad.